Con el propósito de velar para que los productos de uso y consumo humano cumplan los parámetros de higiene sanitaria, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria, Arcsa, a través de su coordinación zonal 6, realiza inspecciones en los establecimientos categorizados como panificadoras en las provincias de Azuay, Cañar y Morona Santiago.

En estas visitas, que se realizan de acuerdo a una planificación semanal, los técnicos de Arcsa ejecutan una inspección minuciosa tanto de la infraestructura de estos locales como de su proceso de producción, a fin de evitar que existan fuentes de contaminación como plagas, mala manipulación o caducidad de la materia prima, personal sin indumentaria adecuada, entre otros factores de riesgo. Además, verifican que las notificaciones sanitarias y permisos de funcionamiento entregados por Arcsa no estén desactualizados.

Una vez que se cumple con la revisión, los analistas levantan un informe en el cual se detallan todos los aspectos encontrados; dicho documento es entregado al propietario, representante legal o representante técnico, para que tome las correcciones debidas en el menor tiempo posible. La asesoría de los técnicos de Arcsa es muy importante al momento de cada inspección, pues contribuye a que los establecimientos donde se elabora el pan ofrezcan al ciudadano un producto de calidad.

De esta forma, Arcsa controla que la producción de este alimento cuente y cumpla con todos los estándares de calidad solicitados en las cadenas de elaboración de los productos de consumo y uso humano.

 

 

 

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