El Plazo para cumplir con lo establecido en el Reglamento Sanitario de Etiquetado de Alimentos Procesados para el Consumo Humano no se extenderá, así lo informaron en rueda de prensa conjunta el Ministro Coordinador de Producción, Empleo y Competitividad, Richard Espinosa Guzmán y la Ministra de Salud Pública, Carina Vance, esta mañana.

El plazo culminó el 29 de noviembre, no obstante luego de algunas reuniones con el sector productivo y con el objetivo de apoyar a las empresas, se permitirá que los productos que no tienen el nuevo sistema gráfico en la etiqueta permanezcan en percha hasta agotar stock, siempre y cuando el producto haya sido elaborado antes de los plazos establecido por la normativa.

“Hemos verificado en los supermercados un altísimo cumplimiento de esta normativa, y dado a este esfuerzo por parte de la industria alimenticia creemos conveniente dar la posibilidad de que puedan agotar todo el stock de los productos que no tienen esta etiqueta siempre y cuando el producto haya sido elaborado antes de la fecha máxima de plazo. Evidentemente el producto no debe estar caducado” expresó el Ministro Espinosa.

El Reglamento entró en vigencia el 29 de noviembre de 2013 y tuvo el objetivo de informar de forma clara sobre el contenido nutricional de los alimentos, de modo que la ciudadanía pueda escoger el producto que prefiera. El Reglamento consiste en que los productos cuenten con un sistema gráfico en las etiquetas que señale si los productos tienen contenidos altos, medios o bajos en azúcar, grasas y sal.

La ministra Vance afirmó que la política del etiquetado de alimentos ha sido exitosa, “como MSP hemos cumplido el objetivo de dar a conocer a la ciudadanía información importante para que puedan elegir de manera consciente e informada sobre los alimentos que consumen”. Así también, informó que en octubre de 2014 se logró que la Organización Panamericana de la Salud, expida una resolución de forma consensuada entre los ministros de salud de todo el continente americano, para luchar contra la obesidad; en esta se incluye como meta que cada uno de los países tenga un sistema de etiquetado y se utilice el sistema ecuatoriano como modelo.

El reglamento establecía que la industria de alimentos tendría que hacer el cambio del etiquetado en un plazo de 6 meses, a partir de la fecha de expedición del mismo (29 de noviembre de 2013), es decir hasta el 29 de mayo de este año para las medianas y grandes empresas, y de un año para las pequeñas y microempresas (29 de noviembre de 2014). Sin embargo, se fijó un período de tres meses más para las medianas y grandes empresas (29 de agosto) para que puedan convivir, de manera paralela, los productos que hayan estado en bodega sin la nueva etiqueta con los que ya tienen el sistema gráfico, con el objetivo de terminar con el inventario existente.

Se estima que aproximadamente un 14% de la producción total de alimentos procesados podría estar todavía en percha y tiene que agotarse, a pesar de ser un porcentaje mínimo, significa millones de dólares para la industria alimenticia, por lo cual a través de la modificación al reglamento se pretende no afectar a los productores y beneficiar al consumidor.

Todos los productos que están en percha y no cuenten con el sistema gráfico, pero que hayan sido producidos por las grandes y medianas empresas antes del 29 de agosto, no serán motivo de sanción y de igual manera para los productos de las pequeñas y microempresas que hayan sido producidos antes del 29 de noviembre.

El ARCSA está realizando controles, con inspecciones en las plantas de producción. Actualmente toda la producción de alimentos debe procesarse con la nueva etiqueta, para quienes incumplan la normativa se procederá a la suspensión o cancelación del registro sanitario.

El reglamento reitera también que los productos  que contengan componentes transgénicos deberán incluir la leyenda “Contiene Transgénicos y establece que los alimentos que contengan uno o varios edulcorantes no calóricos deberán incluir la leyenda “Este proceso contiene edulcorante no calórico”.